Un puerto, soñado durante 150 años, ayuda a las comunidades afrocolombianas a mejorar sus vidas

Un campo interminable de árboles de banano da la bienvenida a los visitantes que vuelan a Apartadó, una ciudad ubicada en el departamento de Antioquia en el mar Caribe. En la zona próxima a la frontera con Panamá se concentra más del 75 % de la producción de banano de Colombia.

Un visitante podría esperar encontrar una instalación portuaria de clase mundial para exportar toda esa cantidad de fruta. En lugar de ello, se enterará de que la primera propuesta para construir un puerto en el golfo de Urabá se analizó en 1871 pero, después de varias decenas de falsos inicios a lo largo de 150 años, la construcción solo empezó en 2022. Esto fue posible porque el consejo comunitario de Puerto Girón, una de las comunidades afrocolombianas afectadas por el proyecto, solucionó un obstáculo legal que había paralizado la construcción en 2019.

Puerto Antioquia, una instalación portuaria de vanguardia

Andrés Bustos Isaza, gerente de Puerto Bahía Colombia de Urabá/Puerto Antioquia, la empresa a cargo de la construcción del nuevo puerto gestionado en forma privada y ubicado en el lado sureste del golfo de Urabá en Antioquia, dijo que este servirá a buques cargueros de hasta 366 metros de longitud y en él se podrán gestionar 14 000 contenedores de carga de 6 metros de largo.

Los productos agrícolas (bananos, piñas y aguacates), los vehículos y la carga general se manejarán utilizando dos instalaciones interconectadas, que consisten en una plataforma mar adentro de 1,38 kilómetros y una terminal tierra adentro y una instalación logística que se extiende a lo largo de 38 hectáreas acoplada a un viaducto de 3,8 kilómetros y un camino de acceso.

“Las instalaciones en Puerto Antioquia reemplazarán el uso de barcazas privadas para llevar las exportaciones agrícolas a los buques cargueros en alta mar donde actualmente se cargan con las grúas de los barcos”, dijo Bustos Isaza. “Se podrá dar servicio a hasta cinco buques cargueros cada vez”.

Si bien Puerto Antioquia no es uno de los puertos más grandes de Colombia, se espera que tenga un impacto importante en la economía del país. El puerto será el más cercano a los centros donde se genera alrededor del 70 % del producto interno bruto de Colombia, así como al canal de Panamá.

Una vez que el puerto inicie sus operaciones, las empresas del triángulo de oro de Colombia —que se extiende entre Medellín, Bogotá y el “Eje Cafetero”— podrán realizar actividades de exportación/importación en un lugar que se encuentra 350 kilómetros más cerca que cualquier otro puerto. Bustos Isaza cree que la reducción de los costos operativos y del transporte debido a un acceso más rápido al puerto y una instalación moderna para agilizar las operaciones atraerá a las principales empresas y las nuevas compañías navieras.

J.P. Morgan Chase Bank, N.A. otorgó un préstamo de USD 103,7 millones a Financiera de Desarrollo Nacional S.A. (FDN), una empresa estatal creada para promover la infraestructura en Colombia, que a su vez proporcionó financiamiento mediante deuda a Puerto Antioquia. El Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) garantizó el préstamo de J.P. Morgan.

Paola Horrillo Espitia, funcionaria de FDN, señaló que la entrega de financiamiento para el desarrollo de Puerto Antioquia era una gran prioridad. “Este es uno de los proyectos de infraestructura con el mayor impacto potencial en la competitividad de Colombia en los mercados mundiales. Sabemos que la economía del país se beneficiará, ya que la actividad exportadora e importadora se llevará a cabo con una eficiencia mucho mayor cuando el puerto comience a funcionar”, dijo.

FDN recibió con agrado el apoyo de MIGA para garantizar el financiamiento en dólares de J.P. Morgan, un importante actor en los mercados internacionales de capital, a un costo favorable que no habría podido obtener de otro modo. La construcción del puerto también recibió el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo a través de BID Invest en calidad de prestamista principal. Se estima que los costos de construcción del puerto superarán los USD 700 millones, y que la fase inicial costará alrededor de USD 400 millones.

José Ocampo Gaviria, quien era ministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia cuando se inició la construcción de Puerto Antioquia, señaló que las relaciones del país con organizaciones de desarrollo internacional como el Banco Mundial fueron fundamentales para superar los impactos de la pandemia de COVID-19. “Hemos trabajado para facilitar la inversión extranjera directa, permitiendo a los inversionistas privados participar en todos los sectores económicos”, dijo Ocampo Gaviria. “Se agradece enormemente el apoyo brindado por MIGA a proyectos en Colombia en los últimos años. Esperamos muchas más colaboraciones en el futuro”.

Las comunidades, arraigadas en el pasado, reivindican los derechos colectivos en la actualidad

Las raíces de las comunidades afrocolombianas en Colombia se remontan a personas que provenían de diversas regiones y grupos étnicos africanos y que llegaron al continente americano como esclavos. Cada comunidad está conformada por un conjunto de familias con una cultura, tradiciones y costumbres que las distinguen de otros grupos étnicos. Se les reconoció legalmente por primera vez en la década de 1990 como un pueblo con derechos colectivos a la tierra y conocimientos ancestrales, que contribuye a la diversidad étnica y cultural de Colombia.

El Consejo Comunitario de Puerto Girón representa a unos 700 habitantes que reclaman el derecho a las tierras donde la comunidad ha vivido durante generaciones. Este reclamo generó lo que parecía ser un obstáculo insalvable para el desarrollo de Puerto Antioquia, una obra que incluye construcciones en una parte de esas tierras. Las familias viven en pequeñas estructuras de madera construidas sobre pilotes. “Tenemos muchas necesidades básicas insatisfechas”, explicó Porfirio Serna, uno de los líderes del consejo. “Nuestra comunidad no tiene agua corriente y el acceso a la electricidad producida por un generador está limitado a unas pocas horas al día. No hay ningún hospital cerca. Las mujeres embarazadas de nuestra comunidad están en riesgo durante el parto”.

Debido a las reclamaciones de los derechos sobre las tierras de Puerto Girón, los tribunales habían impuesto restricciones en un área de más de 11 000 hectáreas que impedían a los desarrolladores obtener permisos ambientales cuando aún se estudiaba el reclamo. Los desarrolladores del puerto cerraron su oficina local cuando el enfrentamiento, que se inició en 2019, se extendió por dos años. “No vimos un camino claro para resolver el impase ante la corte"”, explicó Bustos Isaza. “Pensamos que el proyecto había llegado a un punto muerto”.

Las comunidades y Puerto Antioquia: planificar juntos un futuro mejor

Puerto Antioquia se comprometió con un proceso de desarrollo participativo que abordaba los problemas económicos, sociales y ambientales, buscando soluciones aceptables para todas las partes interesadas más allá de las exigidas por la ley. Durante los ocho años transcurridos desde el inicio del proyecto, había trabajado cuidadosamente para generar confianza entre las comunidades afectadas. MIGA, BID Invest y FDN trabajaron estrechamente con Puerto Antioquia para apoyar la implementación de las Normas de Desempeño Ambiental y Social de MIGA.

“Sabíamos por experiencias anteriores con otros proyectos portuarios que era crítico involucrar a las comunidades afectadas para el éxito de Puerto Antioquia”, dijo Bustos Isaza. Las negociaciones entre los desarrolladores y los consejos comunitarios de Puerto Girón y las comunidades negras de Nueva Colonia, así como representantes de otras comunidades afectadas, condujeron a una serie de acuerdos que darán lugar a iniciativas específicas destinadas a generar beneficios tangibles para todas las partes.

Los acuerdos abarcan una amplia gama de temas económicos, culturales y ambientales. Un grupo de trabajo de instituciones educativas, en coordinación con funcionarios portuarios y en consulta con las comunidades afectadas, está preparando planes, que incluyen capacitación de la fuerza laboral local con énfasis en los empleos relacionados con los puertos, y otorgando becas universitarias. Además, Puerto Antioquia ha establecido procesos internos para proporcionar un trato preferencial a las empresas locales, y está impartiendo capacitación y entregando recursos a las empresas locales para que sean las primeras en aprovechar las oportunidades de conseguir contratos durante y después de la construcción del puerto.

Andrés Maturana González, alcalde de Turbo, hizo hincapié en que la zona ha sido profundamente afectada por conflictos militares y violencia relacionada con las drogas a lo largo de décadas. “Estamos listos para seguir adelante. El puerto generará oportunidades de empleo, pero igualmente importante será el efecto estimulante en nuestra población más joven que se beneficiará de las mejores oportunidades educativas. Los ingresos fiscales generados por nuevos negocios nos permitirán mejorar la calidad de vida con mejores caminos, líneas modernas de abastecimiento de agua y alcantarillado, y muchos otros proyectos de infraestructura para servir a nuestra población”.

Para promover el crecimiento futuro y preservar el medio ambiente, los desarrolladores se han comprometido a ayudar a las comunidades a ejecutar proyectos de infraestructura. Un importante compromiso con Puerto Girón se centra en atraer turismo ambiental a la zona. “Esperamos con interés la construcción de un muelle en nuestra comunidad”, dijo Porfirio Serna. “Tenemos la esperanza de que atraiga turistas que quieran disfrutar del santuario de aves en nuestras tierras”.

Liderar el camino para que el puerto sea una realidad

Los líderes de Puerto Girón reconocieron los potenciales beneficios económicos y sociales para la comunidad derivados del desarrollo de Puerto Antioquia. Si bien los avances se detuvieron debido a la orden judicial, el consejo sostuvo conversaciones con los desarrolladores del puerto para encontrar una solución al impás.

En julio de 2021, durante una audiencia pública ante el tribunal, el Consejo Comunitario declaró que no tenía objeciones para que se iniciara la construcción de Puerto Antioquia mientras se resolvía su reclamación de titularidad de las tierras. Con esta declaración la comunidad de Puerto Girón despejó el camino para que la construcción de Puerto Antioquia comenzara más de 150 años después del análisis de la primera propuesta portuaria.

Poco después, el tribunal eliminó las barreras legales de modo de permitir a Puerto Antioquia obtener los permisos necesarios para comenzar la construcción. Posteriormente, finalizó el proceso de obtener financiamiento para el puerto, que incluye los préstamos de FDN garantizados por MIGA. La construcción se inició en abril de 2022. Se tiene previsto que la fase inicial termine en 2025, cuando el puerto comenzará sus operaciones.

Luis Gilberto Murillo, embajador de Colombia en Estados Unidos, atribuye el exitoso resultado en Puerto Antioquia al sincero deseo de los desarrolladores de trabajar con “las comunidades” y otros grupos afectados por el proyecto. “Se necesitan años para establecer una relación de confianza con estas comunidades”, dijo. “El tiempo invertido en este esfuerzo producirá beneficios de largo plazo para todos los involucrados, porque las comunidades entendieron que sus preocupaciones se estaban teniendo en cuenta cuando se planificó el proyecto”. Murillo cree que el enfoque adoptado por los desarrolladores de Puerto Antioquia debería servir como modelo para otros proyectos en Colombia y el resto de América Latina.